La Casa del Padre.

La casa  era la envida del pueblo , de planta cuadrada de anchos muros de adobe y tres pisos , con un palomar coronando el centro . Había sido construida por el hermano menor de mi abuelo que según me contaron fue engañado por un tratante de frutas valenciano y tuvo que vender su herencia entre los hermanos y empezar un periplo que le llevó a la Argentina , al París de la ocupación para finalmente regentar una pensión  de estudiantes en un piso de la calle Aribau de Barcelona . Cada verano y cada navidad cogíamos un expreso en la Estación de Francia que nos dejaba en Calatayud y de allí otro tren que nos llevaba por fin a casa de mis abuelos , la casa de la que estoy hablado .

En la puerta de entrada figuraba impreso en chapa un cristo protector y una mano de hierro que servía de picaporte , un enorme salón era la entrada , hacia el este la cocina , con un hogar siempre con lumbre rodeado por unos bancos de madera de los que se podía abatir una pequeña mesa donde desayunar los huevos fritos , entonces no había agua corriente y en un lado se alineaban cántaros , tinajas y fregadero .  También en la planta baja habían un dormitorio , el comedor , la entrada a las cuadras y el corral y unas espaciosas escaleras que te llevaban a los dormitorios y un comedor para los días de fiesta . Esta segunda planta tenía todas la paredes trabajadas en estuco de colores , azuletes , sanguinas , ocres , rematados con cenefas y los dormitorios tenían balcones que daban a la vega del rio , llena de árboles frutales y huertos como jardines , finalmente en el tercer piso estaban los graneros , donde se guardaban las cosechas de trigo y colgaban los jamones .

Mi madre tuvo una noche una tremenda pesadilla en uno de aquellos dormitorios llenos de luz y de color   que me repetiría durante años , en una angustia tremenda soñaba como me robaban e irremediablemente me perdía .

Es curioso , esta noche en un momento de duermevela he entendido la pesadilla de mi madre , no era yo el hijo que le robaban , era mi hermano .

Unos años antes daría a luz en una de aquellas hermosas habitaciónes a mi hermano Santiago el cual nacería muerto , ni se lo enseñaron , lo bautizaron y le dieron la extremaunción al mismo tiempo y lo hicieron desaparecer , así de brutal .

No era yo , porque yo no vine a nacer y morir en aquella casa , yo nacería años más tarde en un cruce de calles , la Rambla Volart con el Paseo Maragall en una clínica que ya no existe , frente a una churrería que sí existe , donde sirven chocolate con churros y enormes paquetes de patatas fritas , la churrería Masip .
( Las obras que acompañan son apuntes del 2012 y el óleo sobre tela "Rambla Catalunya" de 1990 )